domingo, 20 de enero de 2019

ESPAÑA: Podemos, las alianzas electorales y Errejón

Las coaliciones, alianzas, frentes o partidos instrumentales, son viables y efectivas cuando se piensa y se logra que la suma de sus integrantes y electores tendrá un efecto multiplicador en las elecciones, o sea que habrá una sinergia política, que permitirá alcanzar más votos y escaños, al nivel que sea. ¿Qué ha pasado entonces desde la alianza electoral de Podemos e Izquierda Unida? Unidos Podemos ha obtenido menos escaños que cuando se han presentado por separado, no sólo en las últimas elecciones nacionales, sino también ahora en Andalucía. Probablemente, sus programas por separados tienen mucho en común, y existe una gran afinidad ideológica y afectiva entre sus dos máximos dirigentes, pero entre su membresía y simpatizantes hay diferencias.

 Muchos, dentro de ellos yo, vemos que la alianza y participación de Podemos e IU en las elecciones, como un bloque único, ha sido percibido por muchos como un escoramiento de Podemos hacia la izquierda, desmovilizando a parte de su electorado inicial por abstención o regreso al PSOE, ahora de Pedro Sánchez. El efecto esperado fue mal calculado, no multiplica, y ni siquiera suma. La membresía y electorado de Izquierda unida, es militante e ideológicamente homogénea y coherente; y no pocos, ya sea por temor a ser absorbidos por Podemos como partido, o por desconfianza o por vanidad, no aprueban esa alianza. 

Si vamos a Podemos, resulta que sus electores, están muy segmentados dentro del factor común de la indignación y la decepción por los partidos políticos y la política tradicional; son  muy heterogéneos por su extracción social e ideológica. En sus orígenes, y en mucho hasta hoy, son ciudadanos procedentes de los más diversos sectores sociales, que sufrieron en carne propia o cercana la crisis; que vieron frustrados sus sueños y sus carreras profesionales, laborales, o de emprendedores; que perdieron sus empleos o negocios; gente que perdió su estatus social, y se vio arrojada de golpe a la precariedad; gentes que perdieron sus ingresos bancarios o su vivienda; jóvenes y menos jóvenes que tuvieron que replegarse al hogar familiar, renunciando a su independencia, y/o que tuvieron que solicitar ayuda familiar para sobrevivir; en fin, gente machucada y marcada por la crisis. Toda esta gente marginada por la crisis, abandonada a su suerte, se indignó contra el gobierno de turno, contra los políticos y partidos tradicionales. El 15M, que surgió como un movimiento civil espontaneo, de la calle, se transformó gradualmente en un partido (Podemos), muy peculiar, para poder acceder y hacer política también desde las instituciones del Estado. Y digo peculiar, porque es un partido instrumental de por sí, por la composición y aspiraciones transversales de su electorado; y por la exigencia participativa de su membresía en la toma de decisiones. 

  Podemos, no puede abstraerse de esa realidad que le dio origen; y siempre tiene que estar reinventándose, para no perder su esencia. Podemos encarna la decepción, la desconfiada de todos y en todo, y la exigencia de protagonismo político, a partir de una nueva mentalidad democrática que responde al “no quiero que me representen, quiero representarme yo"; "no quiero que voten y acuerden por mí, no, quiero hacerlo yo”. Tanto en su composición como en su dirección, predomina una juventud apasionada, llena de energía y deseos; pero este partido no lo fundó una sola persona, sino un grupo de jóvenes, con mucho aval teórico universitario, pero sin experiencia política previa. El grupo inicial se siente fundador, de igual a igual, y algunos no aceptan las reglas de la democracia, donde al margen de la razón o no, la minoría ha de subordinarse a la mayoría y a la disciplina, que ello demanda, aunque esté representada en los órganos de dirección.

Ese espíritu contestatario y rupturista de Podemos y sus dirigentes y seguidores contra el anquilosamiento y cdescomposición la política tradicional, su falta de unidad ideológica, y de una disciplina vertical partidista tradicional propia de otros partidos tradicionales, hace la conducción y supervivencia de Podemos muy compleja, pues desgraciadamente no todos están a la altura. A todos los une un programa común, y un sentimiento democrático participativo, que los hace más democráticos y diferentes; sin embargo, esa heterogeneidad y el sentido equivocado de la democracia partidista de algunos, los hace frágiles, vulnerables e inestables, ante tanta ambición de protagonismo de sus líderes fundadores; y eso pasa factura dentro de su electorado. Para que exista un partido, no sólo debe haber un programa; también un orden y una disciplina, por muy  democrático que sea, de lo contario es un caos, o en el mejor caso, un grupo de anarquistas. Democracia y anarquía, son antónimos.
 El desespero o ambición personal de Errejón, al saltarse a la torera la disciplina y la dirección nacional de Podemos, o de equívocamente trasladar el ambiente de auditorio, de foro universitario, de discusiones teóricas, intelectuales a la política, no deja de ser una gran irresponsabilidad, que ha puesto en riesgo no sólo la  propia existencia de Podemos, sino el futuro de la izquierda madrileña y el desenlace electoral, a sólo escasos meses de las municipales y autonómicas. Nada lo autoriza a saltarse el mandato, como si fuese un candidato independiente o un partido independiente. Si es lo que quiere, que lo haga desde fuera de Podemos. No es la primera vez, que Iñigo promueve mediáticamente, acciones para imponer sus criterios. Sin embargo ya el mal está hecho, y en nombre de la izquierda hay que encontrar una salida.

Hablando serenamente, creo que la idea en sí, de ir todos a las autonómicas bajo la marca Madrid Carmena o Mas Madrid no es mala, porque  los partidos tienden a ser excluyentes, porque sus direcciones están obligados a tomar posición en determinadas circunstancias y situaciones, y eso puede excluir a mucha gente. Creo que al final la izquierda sumaría votos y escaños. La decisión unilateral, no consensuada de Errejón exige una respuesta disciplinaria, y en principio debería ser excluido de la dirección de Podemos, pero no se puede sancionar el resultado de las próximas elecciones, en Madrid y en todo el país. Particularmente pienso, que lo más importante para la izquierda y a quienes representan, es llegar al poder y recuperar o avanzar en los cambios sociales. Las siglas, los partidos, son un vehículo para participar activamente en la vida política, pero no la razón de ser. En mi opinión, la dirección nacional de Podemos está obligada moral y responsablemente, a pedir el voto de Podemos a Mas Madrid, y apoyar su candidatura; obviamente, sobre la base de la negociación previa de un programa, y lista.

Ahora mismo, Podemos podría estar implosionando, podría fraccionarse y dejar de ser un partido nacional. Necesita tiempo para reorganizarse y reinventarse después de las elecciones municipales y autonómicas. La prioridad hoy, es lograr que la izquierda se presente unida a las elecciones y llegue al poder. En muchas comunidades la marca Podemos no es mayoritaria dentro de la izquierda, aunque si sus primos hermanos, las Mareas, Compromís, y Podemos en común. Tal vez es la hora de que Podemos se replantee sus objetivos, y sin renunciar a su idea de partido, trabaje más por la unidad de la izquierda, con el mejor candidato al frente, sin importar las siglas. Podemos dio forma y alma política a un movimiento civil, contestatario; y alumbró el camino al resto de la España inconforme, para organizarse y luchar por alcanzar el poder político. Su mérito y papel es incuestionable, y por eso no puede ir contra su esencia fundacional. En mi opinión, debe priorizar su función de coordinador de las izquierdas, desde una junta donde estén representadas todas las izquierdas en proporción a sus electores o afiliados, bajo un programa mínimo común, y con candidatos comunes.


jueves, 1 de noviembre de 2018

CUBA: La emigración cubana, el bloqueo de EEUU, y el pueblo cubano residente

Dichos o refranes, como “no hay nada como un día tras otro”, o “nunca es más oscuro que antes del amanecer” o “el tiempo todo lo cura”, son frases de apoyo moral ante fracasos, pérdidas afectivas, frustraciones, putadas de la vida, etc. Expresan la sabiduría popular acumulada, invitándonos a tener una mentalidad positiva, a seguir adelante, a reconciliarnos con el pasado y a comenzar de nuevo; a mirar al frente y a buscar nuevas oportunidades. Por suerte o por desgracia, nuestra memoria no se borra, porque dejaríamos de tener un pasado, y perderíamos la base de nuestro conocimiento; pero nuestros recuerdos si pueden ser distorsionados por el tiempo y la edad, y/o manipulados y moldeados, en el buen y mal sentido, por el medio familiar y social en que nos desenvolvemos. Nuestros juicios son resultado de la interacción de nuestros recuerdos, vivencias y el medio. 
Si el medio es positivo, tolerante, terminaremos superando los malos recuerdos, y centrándonos en el futuro. Hay recuerdos traumáticos, vivencias durísimas, o desarraigos a determinada edad, que nos dejan marcados para toda la vida, y que sólo en un medio neutral y positivo se pueden paliar; y se puede llegar a perdonar y perdonarnos según sea el caso; y llegar a ser tolerantes y objetivos. Cuando el “mensaje” del medio es agresivo y reiterativo, en la misma dirección que nuestros malos y regulares recuerdos, esos malos recuerdos son retroalimentados, activados y fijados en nuestras mentes, creando un estado permanente de frustración, resentimiento y odio que nos atrapa y priva de la verdadera felicidad, y que no nos deja hacer valoraciones realmente objetivas, ser tolerantes, proactivos y justos. 

Aplicado a la realidad de la emigración cubana, me pongo en la piel y me solidarizo con todo aquél que fue tratado injustamente porque se iba del país, llegándosele a confiscar todos sus bienes personales; de los que fueron estigmatizados y/o limitados en su progresión social por su religiosidad, forma de pensar diferente, o por su homosexualidad; en aquellos que fueron expulsados de la universidad por diversionismo ideológico, o que fueron repudiados de boca y obra, con huevos, etc., porque se acogían a su derecho legítimo de irse del país. No pido, ni puedo pedirle a nadie que olvide; porque el pasado también es conocimiento, es historia, es referencia. Mucho menos les pediría que lleguen a apoyar a la revolución y a su gobierno, ni siquiera les pediría que perdonaran; pero si les pido hacer un esfuerzo y liberarnos de esa carga emocional que no nos deja ver que todo lo que contribuya por activo o por pasivo, a sostener o agudizar las carencias y limitaciones materiales de nuestros conciudadanos residentes en Cuba, es malo. Hay que interiorizar, que todo lo que frene desde el exterior el bienestar de esos que están dentro y comparten nuestros muertos y muchos de nuestros recuerdos familiares, de amigos de barrio, y de compañeros de aula, de fiestas juveniles, de trabajo, es malo. Le pido lo mismo, a esa gran mayoría que no emigró por problemas políticos, ni por ser maltratados de una forma u otra, sino en busca de mayor bienestar y oportunidades, porque se lo que es el desarraigo, la añoranza, y las dificultades de insertarte en otro país. Yo también me fui, emigré, pero en otras circunstancias más propias de todo el emigrante, fruto de las posibilidades de la globalización; y aunque pudiera buscar culpables de mi desarraigo (tan común en un mundo globalizado), y en mi difícil inserción en mi otro país (España), por la edad, etc., paso, porque fue decisión mía, como la de la mayoría, y mi amor por una Cuba de todos y para todos, e independiente, está por encima de cualquier frustración. Tal vez por considerarme un sobreviviente en todos los sentidos, apuesto por la positividad, el amor a la vida y a los míos, por el respeto mutuo y la tolerancia, y por el entendimiento, aún y a pesar de las diferencias ideológicas. 

A pesar de que defiendo la existencia de ideologías en un mundo con tanta diferenciación social, pienso que el entendimiento es posible si encontramos un denominador común, un interés común, que esté por encima de ideologías, de estereotipos, de negatividad, y de la condicionalidad del pasado; y ese denominador común se llama Cuba y su pueblo residente. Creo que la historia pondrá cada cosa, y a cada cual en su lugar; y las nuevas generaciones, a ambos lados, lo harán con mayor objetividad que nosotros. Pero también creo, que ningún país en el mundo tiene derecho a imponer su modelo, a imponer condiciones o a tratar de condicionar los procesos internos de cada país. El pluralismo en política, uno de los grandes valores de las democracias occidentales, a nivel internacional se llama multilateralismo; es decir, el reconocimiento y respeto a los asuntos internos de otros países, a su libre elección y autodeterminación. Los que nos consideramos demócratas, deberíamos ser consecuentes con ello.

Ideológicamente, alguien podrá justificar el Bloqueo y llegar a decir que sólo así se caerá la Revolución, pero en el fondo todos sabemos que no ha sido ni es así; y que además de injerencia, y la intromisión ha traído más limitaciones y carencias para los cubanos de a pie, que son la gran mayoría. Todos sabemos que moral y humanamente, es un acto de magnicidio social. En el fondo, todos los que han trabado contacto con la realidad plural de su población residente, saben que una gran mayoría no va a hacer nada para derrocar el gobierno, y ya no por temor, sino porque apoyan el proceso ó porque quieren progresar como persona y como país, pero temen perder las ventajas sociales que les dio la revolución, temen los traumas y la inestabilidad política y sus consecuencias. Sino miramos a través de un cristal transparente, por más que miremos o escuchemos, siempre será lo que queremos ver y escuchar. Sino salimos de nuestro círculo, las conclusiones siempre serán las mismas. 

Reconociendo, que el modelo de gestión es ineficiente, el levantamiento del bloqueo, sin dudas rentabilizaría más los exiguos ingresos en divisa del país, sólo por concepto de cercanía y flete. Cuba es un mercado natural para EEUU, atractivo para muchos sectores norteamericanos: agricultores, operadores y gestores turísticos, empresas tecnológicas y de biotecnología, inmobiliarias, etc. Fluirían los créditos y las inversiones no sólo desde EEUU, sino a nivel internacional, sin restricciones extraterritoriales; y automáticamente se reanimaría la economía y el nivel de vida de la población. Para los que quieren que se caiga la Revolución, pienso que no hay mayor reto para su dirección del país, que conservar sus valores y su orientación política, en medio de una influencia arrolladora del sector privado, del turismo masivo norteamericano, y de la presencia de muchas empresas extranjeras. 

Si la Revolución se cae, será bajo estas condiciones; sino, será signo de que mejoraron ostensiblemente las condiciones de vida de su población, y que la Revolución se reinventó dando más oportunidades de progreso a su población en general y en lo individual; y que ha mostrado más tolerancia aunque mantenga el poder político, y se ha vuelto más inclusiva. ¿Por qué no aceptamos el reto? Este es un terreno común para los que quieren que se caiga y para los que la defienden ¿Acaso no deseamos y queremos lo mejor para nuestro pueblo? ¿O lo que queremos es que se caiga aquello a cualquier costo social, para satisfacer nuestro odio, frustración y resentimiento? Empecemos por unirnos para desmantelar el Bloqueo; y que el tiempo y la historia se ocupen de lo demás. El bloqueo sobrevive por el odio y lucro de legisladores cubanos americanos, que condicionan vuestro voto al presidente, a cambio de la mantención del mismo. Si queremos jugar un papel activo, respetando la resultante, sea cual fuese, tenemos la oportunidad de hacerlo desde ya, por justicia, coherencia y solidaridad con nuestro pueblo 


sábado, 15 de septiembre de 2018

ESPAÑA: Oportunismo y política. Partido Ciudadanos


Siempre me he dicho, que no hay nada más parecido a la política, o viceversa, que el Marketing. Las insatisfacciones, descontentos y frustraciones sociales de una parte importante de la sociedad, son captados o interpretados por un político, un líder, o por un grupo, que las toma como suyas y se presenta como el que los va a representar y va a solucionar sus problemas, si lo apoyan y llegan al poder. En términos de MK, una necesidad insatisfecha se convierte en una oportunidad de negocio, y se presenta un producto (un programa, un ideario) a la medida

 Con el perdón de los soñadores y de los políticos honestos, no hay nada más oportunista que la política. Incluso, cuanto estos soñadores y honestos llevan mucho tiempo en la política, terminan como media, convirtiéndose en oportunistas. La presión empresarial, del mercado, la corrupción, la falta de apoyos legislativos, la proximidad de la campaña electoral, las crisis, etc., los lleva a la senda de oportunismo quieran o no; porque nos guste o no, esas son las reglas del juego. Si las incumplen, son desplazados del poder o de la política. La política es, en última instancia, el arte o la ciencia de llegar al poder y/o de conservarlo; y no pocas veces a cualquier precio. La competencia es dura y pura, y ahí se llega negociando, logrando alianzas, aprovechando oportunidades y rentabilizando debilidades del contrario; dejando a un lado todo lo que no sea posible en ese momento; cediendo y exigiendo; denunciando y haciéndose el de la vista gorda; callando verdades cuando no es aconsejable; moderando el discurso a lo políticamente correcto; sacrificando peones y compañeros de campaña cuando puede estar en peligro la credibilidad del líder, del partido o del gobierno, etc.  Aunque nos pudiera parecer muy crudo, esa es la realidad; ese es el modus operandi de los partidos. No me asombro por tanto, cuando veo oportunismo en los partidos; pero si cuando se pasan, cuando no tienen escrúpulos

El partido Ciudadanos, o mejor dicho, el partido de Rivera, es el mejor ejemplo de ello dentro de la política española. Ha cambiado de orientación ideológica y de traje tantas veces, que resulta difícil seguirle el rastro. Ha sido un tránsfuga ideológico, hasta que encontró su acomodo en la derecha casi extrema; en el liberalismo tradicional de la pequeña burguesía, que envidia a los más ricos, y desprecia a los pobres. En lo político, no se ha quedado atrás, lo que es peor aún. Donde dijo digo,  después dice Diego. Su aplicación de la máxima de llegar al poder a cualquier precio, o del principio maquiavélico de que “El fin justifica los medios” es vergonzante e irresponsable. Su alimentación del nacionalismo español, su llamado al enfrentamiento por encima del dialogo; su intransigencia y apoyo a la política de mantener presos independentistas; y su exigencia para la aplicación nuevamente del 155, pone en peligro la estabilidad territorial de España (Cataluña), pudiendo llevar la situación a un callejón sin salida. Su trauma, por verse alejadas su posibilidades de llegar al poder después de la Moción de censura, lo han llevado a no votar positivamente a la exhumación de los restos de Franco; lo han llevado a promover en el Congreso, sin evidencias y saltándose el reglamento, la desacreditación del presidente Sánchez; pero más censurable es, cuando según algunos medios de prensa y la Universidad autónoma de Barcelona, hay irregularidades y poca transparencia en su currículo; o sea, que no es trigo limpio. Desde la Moción, y amén de los errores del PSOE al arribar y anunciar conclusiones precipitadas, la gestión de Rivera y la de su partido han estado encaminadas a torpedear cualquier medida o proyecto de ley que venga de la izquierda, no importa cual; a levantar columnas de humo; a desacreditar a sus líderes, y a llamar “al degüello”. Oposición sin barreras éticas

 Derecho tienen en una democracia, pero los de izquierda y los moderados tenemos la obligación de desenmascararlos; porque además de sus electores convencidos, sin medias tintas y que respeto, también hay mucha gente confundida

domingo, 26 de agosto de 2018

GLOBAL: La iglesia católica y la pederastia.

Entiendo y me solidarizo con la preocupación y dolor de buenos católicos, ante el cuestionamiento público y global a su iglesia, a raíz del escándalo promovido por la ignominiosa y asquerosa actitud de sacerdotes pederastas norteamericanos durante años. Pero tendrán que comprender la indignación general, cuando se ha profanado lo más puro y sagrado que hay sobre la faz de la tierra: la niñez; cuando sacerdotes pederastas han destrozado la vida de niños, que crecieron con esa vergüenza y sentido de culpabilidad inducido. Dicen los psicólogos, y respetando la libertad de sexo y de orientación sexual en condiciones normales, que el varón difícilmente se recupera del trauma de la violación, marcando su conducta para toda la vida (a la inmensa mayoría). He leído atentamente la carta de un sacerdote, que me enviaron, donde defiende la consagración y obra de muchos sacerdotes, y misioneros, sobre todo en el tercer mundo; y expresa su malestar por el exceso de publicitación de estos hechos, o al menos por su tratamiento unilateral. Me pongo en su piel, y aunque pudiera compartir en parte su preocupación; no creo que este último escándalo en EEUU, sea un hecho tan aislado.

Se han dado, o al menos publicitado, casos connotados de abusos sexuales de sacerdotes en Irlanda, Chile, Australia y España, que recuerde ahora. Mi opinión muy personal, es que no se han conocido más casos con anterioridad, por el secretismo con que la iglesia católica históricamente ha manejado estos temas; por la coacción y amenazas de los sacerdotes pederastas o cómplices, sobre esas criaturas católicas; por el miedo a confesar y no ser escuchados, por el miedo a ser acusados de mentirosos y blasfemos, y a ser estigmatizados por la sociedad. Honestamente, creo que casos como estos se han dado desde los mismos orígenes de la iglesia, desde el inicio del sacerdocio y del enclaustramiento. Hoy, la prensa sobrepasa el marco de la exclusividad de la clase dominante; existen las redes sociales, mayor inmediatez y globalización de la información; hay más presión social; la gente tiene menos prejuicio, menos miedo a confesar lo sucedido, pues ya la sociedad en su conjunto condena estos hechos públicamente, y acepta la homosexualidad condicionada o no. También hay que decir, que algunos se han sentido motivados a confesar, gracias al oído receptivo del Papa Francisco, que condena y castiga a los sacerdotes pederastas.

La publicitación de este escándalo pudiera ser exagerado o ser percibirlo así, pero responde, como en la mayoría de las cosas que suceden hoy, a las reglas aceptadas por la noticia, nos guste o no: la inmediatez, el sensacionalismo y la falta de análisis integral y maduro. Sólo medidas ejemplares por la Iglesia, la condena y perdón por el Vaticano, y el tiempo, podrán relegar noticias como estas a un segundo, tercer plano, pero no resolverán el problema; ni tampoco se olvidará, porque es  demasiado fuerte, que no pocos sacerdotes, “representantes” terrenales de dios, hayan practicado tamaña barbaridad y aberración   

Fiel, a mi espíritu de buscar las causas de los problemas, me voy más allá en mi análisis. Para mí, la verdadera causa de estas aberraciones sexuales y doble moral de muchos sacerdotes, la veo en el sacrosanto celibato. Supongo, que la fundamentación y mantención del celibato, responde  al supuesto de que permitir que el sacerdote tenga familia, conllevaría a que a la larga anteponga su familia a la familia feligresa,  anteponga sus intereses personales a los de la iglesia; y no sea identificado como líder espiritual, sustentado en su entrega total a Cristo. Pero creo, que esto va contra natura, y nada contra natura puede generalizarse, ni mantenerse. Las iglesias protestantes rompieron con ese dogma, y crecen. Hoy en España, hay un cura para 4-7 iglesias, con misas esporádicas; no hay relevo sacerdotal. No niego, que hubo y hay muchos sacerdotes y monjas entregados a dios; que han renunciado de corazón y obra a los placeres mundanos, al sexo; pero también sé que eso exige mucho sacrificio y entrega, y la carne es débil. También sé, que mientras la iglesia católica tuvo mucho poder, y el estado era confesional, en muchos países, el sacerdocio también fue asociado a poder y bienestar, más que a vocación espiritual. El sacerdocio, junto al militar, llegó a ser la carrera más codiciada por las familias españolas para sus hijos. O sea, que en muchos casos faltó vocación sacerdotal; y hubo coacción familiar y motivación material. A manera de anécdotas puedo ilustrar, que aquí en España es usual hablar de cementerios de hijos de monjas en los patios de los antiguos monasterios; es común escuchar en los pueblos y aldeas, sobre hijos “ilegítimos” de sacerdotes, incluso conocer a algunos; y es común escuchar sobre relaciones sentimentales de sacerdotes con alguna que otra miembro de su parroquia. ¿Qué no son todos los pederastas, ni los que practican la doble moral, ni siquiera la mayoría? Vale; ¿Qué en unos países se han dado y se dan estos hechos, más que en otros? Vale; pero este desagradable hecho que saltó en EEUU, es sólo la punta del iceberg

Creo, que este es el tema muy álgido, que la iglesia católica deberá enfrentar con sabiduría y decisión, porque en ello va su futuro. Tendrá que buscar una salida duradera y viable a esta problemática, levantando el celibato; porque no sólo minimizaría los casos de pederastia, sino que también aseguraría la continuidad de la iglesia, del sacerdocio, y los haría más humanos y cercanos a sus feligreses. Ahí está el verdadero sacrificio, no en el enclaustramiento, ni en la abstinencia sexual obligada, que aunque no deja de ser meritorio, resulta fácil cuando se renuncia a lo que no se conoce y no se ha vivido. El reto está en conocer y experimentar los retos de una vida común, vivir como los demás, y sobreponerse a las tentaciones materiales y mezquindades humanas. Entonces, si habría un líder espiritual concreto, cercano y no abstracto; un líder espiritual no por estar envuelto en un hábito, ni por su capacidad de absolver pecados en nombre de Cristo, con lo que no estoy de acuerdo porque lo mistifica, y lo empodera sobre el bien y el mal.