viernes, 31 de mayo de 2019

ESPAÑA: Podemos, ¿crónica de una muerte anunciada?

Evidentemente, Podemos fue el gran perdedor de las municipales y autonómicas. Llámese Unidas Podemos, las Mareas en Galicia, Zaragoza en Común, Adelante en Andalucía con la excepción de Cádiz, o los Comunes en Barcelona, etc., la debacle fue generalizada. Incluso Compromis en Valencia comunidad y ciudad, perdió concejales respecto al 2015. Podemos pudo haber desaparecido de la actualidad política española, como UCD, CDS y UPyD pero no, porque aunque perdió escaños en el Congreso (de 71 a 42) y en el Senado (de 16-5 sino no fuera por la concesión del PSOE) aún tiene representación legislativa e influencia en el Congreso, y puede rentabilizarlos, si juega bien sus cartas. Sin embargo, los resultados exigen mucho análisis y reflexión, y toma de decisiones de calado

Suenan campanas llamando al degüello, se publican alegatos de resentimiento contra la dirección nacional de Podemos y Pablo Iglesias; se dan renuncias de directivas enteras y personalidades de Podemos en los territorios, y no faltan críticas, justificaciones, y argumentos desde todos los lados. 

En mi opinión, lo sucedido se podría explicar desde antecedentes tan “lejanos” como de carácter fundacional, y desde el punto de vista estratégico, previo y durante la campaña electoral. Algo de todo esto lo he estado señalando en este blog, desde las anteriores elecciones generales. 

Podemos, y fíjese que digo Podemos y no Unidas Podemos, después de las primeras elecciones europeas (2014) en las que obtuvo 5 escaños, decidió no trabajar inmediatamente para participar en las municipales y autonómicas del 2015, porque no tenía estructura, ni cuadros en los territorios y no quería correr ningún tipo de riesgo hasta las generales; lo que no dejaba de tener su lógica. Pero el movimiento de los indignados, machucados y marginados por la crisis, no era exclusivo de Madrid; y el modelo Podemos terminó replicándose automáticamente en los territorios, pero con marca propia e independencia. La respuesta de la dirección nacional de Podemos, fueron las Confluencias para las elecciones del 2015, a la que se incorporaron otros partidos de izquierda, ecologistas, nacionalistas, etc. Que en su conjunto dieron la mayoría para dar a luz a los Ayuntamientos del Cambio. 

Después de las municipales, la dirección de Podemos ha tratado de crear y consolidar organizaciones de base en los territorios, pero ya era tarde; ese espacio estaba cubierto, y su insistencia sólo ha servido para fraccionar aún más a la izquierda y al movimiento alternativo de izquierda. La solución era asumirlo, tomar la iniciativa, y propiciar en ese momento la constitución de un partido y dirección federal, donde estuviesen representados en igualdad de derechos todos los territorios y movimientos afines; una organización con un núcleo de programa común para todos, a partir del cual en cada lugar se podrían incorporar sus problemas y soluciones muy propias; y donde se reconociera la independencia y representación de esas organizaciones en los territorios; y a su vez estas aceptaran  la función coordinadora, organizativa y representativa de la dirección nacional de Podemos. En los ayuntamientos se pueden y se hacen cambios, pero los cambios de gran alcance, de carácter trascendental para la sociedad española, se hacen en Madrid; y era y es imprescindible una vertebración nacional de Podemos y afines a nivel nacional, con una cara visible y un liderazgo. Los partidos locales, sean de la ideología que sea, no pueden prescindir de una buena representación y apoyo en la capital.  
  
Después de las elecciones de 2015, en Madrid, Barcelona y otras importantes ciudades donde ganaron las confluencias (estos movimientos a los que apoyó la dirección nacional de Podemos, visualizándolos a nivel nacional, movilizando a sus simpatizantes a votar por ellos), por lo general terminaron volviéndose arrogantes y exigentes, se constituyeron en partidos independientes, y se presentaron a estas elecciones en solitario. La mayoría cortó lo que quedaba de cordón umbilical con Podemos. 

Los malos resultados por venir, eran más que predecibles. Las confluencias dejaron de serlas, y todos se presentaron por separado, divididos, a lo que sumó más paja los enfrentamientos entre Iñigo y Pablo Iglesias, y la falta de tacto de Carmena, que terminaron en la implosión de Podemos en Madrid y una gran repercusión nacional, al arrastrar con ellos a otros líderes de Podemos que renunciaron a sus cargos de dirección y/o representación. ¿Quién tendría fe en unos dirigentes, en un movimiento o partido, donde la rivalidad por el liderazgo está por encima del sentido común, y de los ideales de cambio y mejora social? Esta situación, en su conjunto, terminó decepcionando a mucha gente de izquierda, que finalmente no votó, se abstuvo (también por errores políticos en la mayoría de las alcandías del cambio), o le dio el voto útil al PSOE ante tanta atomización e incertidumbre.

Después del golpe partidista de los Barones socialistas a Pedro Sánchez, y su resurrección, las bases del PSOE se empezaron a animar e ilusionar al igual que antiguos simpatizantes, que decepcionados se habían abstenido en las elecciones de la pasada legislatura, o habían migrado a Podemos o Ciudadanos. La Moción de censura proyectó de nuevo al PSOE como partido de gobierno, permitiéndole hacer y/o que se aprobaran, decretos ley y leyes de contenido social, detrás de las cuales estuvo la exigencia e insistencia de Unidas Podemos, pero que finalmente ellos se llevaron todo el rédito. Esa fue la mejor campaña electoral del PSOE. Sin la moción de censura, los resultados electorales también hubiesen sido otros; pero también porque Ciudadanos (Cs) en su batalla contra el PP para erigirse en la oposición de derechas, abandonó el centro, y esto también benefició al PSOE. 

También benefició al PSOE, el hecho de que Podemos se hubiese escorado muy a la izquierda. El movimiento de los indignados era de izquierda, en cuanto promovía y exigía cambios sociales, protección social, progreso social, y se cuestionaba a los partidos y política tradicional en los que no se veía representado, por el contrario; pero en su composición social era transversal. Había gente de todos los sectores, clases y grupos sociales. Como todo movimiento social que surge y se desarrolla producto y durante una crisis, comenzaría a menguar en cuanto se ha ido rebasando la crisis. El momento de radicalización fue en sus inicios; lo razonable, lógico, y estratégico después, era fortalecer su transversalidad en la medida en que se superaba la crisis y la crispación, aunque los de más izquierda fueran o regresaran a Izquierda Unida. Ese era un voto seguro, agrupado en IU. La izquierda para triunfar, llegar al poder, no puede desarrollar un espacio político, y abandonar otro. Unidas Podemos como confluencia o bloque electoral para las elecciones, me pudiera parecer bien en última instancia, pero hasta ahí. Los dos deben recuperar su espacio natural, aunque haya cooperación y coordinación en determinadas cuestiones. Mucha gente de centro abandonó Podemos, no sólo por las divisiones, sino también porque dejó de verse representado en él; igual ha pasado con simpatizantes de Izquierda Unida, que tampoco se ven representados, sino más bien absorbidos. Ya he dicho en otra ocasión, que esta unión no suma, por el contrario. Ambos trabajan con el mismo “segmento de mercado”, lo que priva a Podemos de la posibilidad de abrirse a otras fuerzas y grupos sociales, que también quieren cambios, y progreso social, sin ser comunista.

Por último, y no menos importante, la incorporación tardía de Pablo Iglesias a la campaña electoral, por la causa o justificación que sea, puso en peligro las generales, que salvó el mismo con su participación madura, serena, equilibrada, educada y bien argumentada, durante los dos debates televisivos electorales. Sin embargo, cuando todo parecía ir a mejor, y Pedro Sánchez evitaba temas escabrosos que pudieran comprometer los resultados, Pablo tuvo que tirarse en la piscina con el tema de la donación de Amancio Ortega. ¿Era tan importante, tan urgente, llevar ese tema a la campaña electoral? ¿Era tan incuestionable la mala actitud de Ortega, que había que denunciarla, porque además ayudaría en los resultados electorales? En primer lugar, no era el momento, ni el tema era tan perentorio; y en segundo lugar, la forma en que se dijo, se argumentó o se publicitó puso en cuestión el humanismo de Podemos aunque no fuese su intención. Se cargaron a todos los enfermos de cáncer y sus familiares, y mucho más ¿A quién se le ocurrió? Pero ya que salió el tema, me explico. Está claro que la Salud pública, la calidad asistencial, la calidad de los equipos de diagnóstico y quirúrgicos, etc., son responsabilidad exclusiva del Estado, y para ello contribuimos; pero el que quiera donar en equipos o en dinero, para contribuir de alguna manera en algunos territorios, bienvenido sea, siempre que no sea para lograr bonificaciones o exención de impuestos por valores superiores, u otras prebendas; y no se convierta en una práctica que tape ineficiencias en la gestión pública de la salud o supla la responsabilidad del estado. Pero en cualquier caso, querido Pablo, si en política no se debe decir mentiras, si se debe saber callar verdad, tu verdad, sino rentabiliza votos.

Las victorias nos vuelven arrogantes cuando no las sabemos manejar, pero los errores y fracasos han de hacernos más humildes y sabios. Aún hay vida y mucha experiencia acumulada, y la dirección  de Podemos y las bases tienen ahora la palabra. Si no se había hecho antes, este es el momento de plantear la refundación de Podemos, su refundación desde una concepción federalista, con nuevos estatutos, órganos, y un programa y estrategia más transversal. En este momento de sabor amargo por la derrota, la dirección de Podemos tiene que iniciar ya conversaciones, buscar consensos y tomar acuerdos para la fusión en cada territorio de las bases de Podemos y partidos y movimientos afines, sin imposiciones, sin ganadores ni perdedores, con sus nombres locales o territoriales (incluyo a Mas Madrid de ciudad y autonómico), y una dirección a nivel de cada territorio, elegida mediante primarias, sin propuesta ni presión por ningún lado; y por último, demostrar desde las Cortes que hay un nuevo Podemos, que apoyará y exigirá al PSOE según aconsejen sus bases y la política, y que ejercerá de garante del rumbo de mejoras sociales, desde una oposición responsable. Lo demás, lo dirá el tiempo.

Ah!, lo de entrar al gobierno con el PSOE, tiene dos caras. Una, de mayor visualización de Podemos, pero que dependerá de cuantos ministerios y de cuales carteras (previsiblemente una o dos) le de el PSOE a Podemos; y por otro lado, el formar parte del gobierno compromete y pone palos en las ruedas a Podemos en la oposición constructiva al PSOE. Al final de esta legislatura, en un gobierno de coalición los méritos se los llevaría el PSOE, si hay buena gestión; pero si no los hay, Podemos se hundiría irremediablemente.
 

 

miércoles, 1 de mayo de 2019

ESPAÑA: Un IBEX 35 sin complejos


Que la Banca o los Bancos siempre preferirán un gobierno de derechas, es más que obvio, y por tanto nada extraña que el grupo Santander promueva un gobierno del PSOE y Ciudadanos. Celebro su declaración de intenciones sin complejos; aunque no deja de ser una intromisión y presión descarada en nuestra democracia, porque oficialmente en España no hay lobbies de presión (una aberración de la democracia norteamericana). Que esta hipotética alianza daría lugar a un gobierno de centro izquierda, es una gran falsedad, que carece de todo rigor político; y en el menor de los casos, expresa desconocimiento total de lo que es la izquierda, y de los orígenes, el argumentario liberal (programa) y de las actuaciones de Ciudadanos. Lo que desea realmente la Botín, las otras empresas del IBEX35, y el presidente de la patronal CEOE, es mantener las políticas de bonificaciones y de exenciones fiscales que han permitido que su contribución efectiva sea sólo del 4-6%; mantener las políticas de desgravaciones a las grandes fortunas y las políticas de gobiernos, mantener las “políticas” de mirar hacia otro lado con las propiedades y dinero de los bancos y otras empresas en paraísos fiscales; las políticas crediticias a los partidos de gobierno para controlarlos a través de sus deudas, que condonarían si terminan cediendo ante ellos. En fin, lo que quieren los Botines es mantener su poder suprasocial, su zona de confort empresarial, e incrementar la tijera de la desigualdad de la riqueza social a su favor, aunque al final se rompa la estabilidad social. 

Según el articulista[1], los bancos están estrangulados porque “les ha pasado factura … el descenso de tipos de interés, hasta dejarlos en negativo como es el caso de los tipos de depósito del BCE, impulsan el deterioro de los márgenes bancarios, que unido a los costes regulatorios que soportan, les ha llevado a tener que adoptar mayores comisiones y hundir la rentabilidad de los depósitos para tratar de conservar todo lo posible sus estrechos márgenes de interés” No entraré en detalles, ni caeré en la retórica; sólo aclararé que en teoría la crisis financiera era global y afectaría a toda la sociedad, ¿No? sin embargo, la Banca del IBEX35 cerró 2018 con no menos de 17,000 millones de euros, y de ellos 7.663 millones de euros al Santander; pero es que incluso Bankia, público o semipúblico hasta hoy, cerró con más 700 millones. ¿De qué vas tío? Es necesario que relacione cuanto se ha recortado y se recorta en lo social, que relacione con datos pocos sospechosos de comunistas, las familias y niños que en España viven por debajo de los niveles de pobreza, los datos de desempleo, de emigraciones de nuestros jóvenes hacia otras latitudes en busca de empleo, de ancianos con una mísera pensión, de gente desahusiadas de sus viviendas por no tener trabajo para poder pagarlas, de gente pasando frío por no poder pagar la calefacción en invierno, etc. 

El PSOE, como dijo alguien, coge el violín con la izquierda y lo toca con la derecha. Desde su fundación, el PSOE jugó un rol progresista, y sin dudas, muchos cambios sociales se deben a su gestión de gobierno. Pero su ocupación del espacio de la izquierda dentro del bipartidismo, por largos años, y la involución de sus barones históricos, sucumbidos ante la riqueza acumulada y el medio, los llevó a renegar hasta de su base social de partido. Su cúpula ya pertenecía a otra clase social, y tenían más compromisos y afinidad con la plutocracia, que con la clase trabajadora. Pedro Sánchez, el superviviente, consciente o inconscientemente (porque lo defenestraron y apartaron de la cúpula) está más cerca de la base, pero aunque sus intenciones sean buenas, la presión de los intocables (IBEX35) y de todos los que lo representan, es brutal. Un gobierno del PSOE, sin Unidas Podemos, terminará cediendo al poder económico, y las medidas no pasaran de la pintura y el colorete. 

La inmensa mayoría de los ciudadanos no está pidiendo que le quiten sus propiedades a los bancos y grandes empresas; sólo están pidiendo revertir los recortes y mejorar las condiciones de vida de todos, en proporción al desarrollo económico, al crecimiento de la riqueza social y a la aportación de cada cual. No puede ser que la carga la lleven sólo los que menos tienen. Y eso es lo que se pretendería lograr de constituirse un gobierno del PSOE y UP; y eso se llama justicia social, sin renunciar al mercado y a la propiedad privada. Dejen de practicar la política del miedo, del susto, del comunismo, del Chavismo, que en un país de una democracia occidental consolidada, y mediatizada por su pertenencia a la Unión Europea, eso no sería posible. Un poco más de responsabilidad social no acabará con la economía española; muy por el contrario. Sólo el desarrollo del capital humano, la inversión en investigación para el desarrollo, las políticas para promover el cambio estructural de la economía y las inversiones en él, el incremento del poder adquisitivo de la población y con ello el incremento de la demanda, aumentarán el nivel de competitividad y productividad de la economía española, se crearía más empleo, y aumentarian las contribuciones a la seguridad social, y con ello la hucha de las pensiones. Y a los defensores del capitalismo, les asegurará estabilidad social y política. Lo quieren todo, Joder. Las sociedades responden a equilibrios; todo tiene un coste, y desconocerlos tiene sus consecuencias  

jueves, 28 de marzo de 2019

COMENTARIOS: Sobre entrevista a Pablo Iglesias

Entrevista de Pablo Moto a Pablo Iglesias, en El Hormiguero/ https://es.yahoo.com/noticias/pique-pablo-motos-pablo-iglesias-214558532.html

En general me pareció buena la entrevista, y las respuestas relacionadas con la compra del chalet, pero creo que Pablo no aprovechó del todo la oportunidad, para dejar bien clara la posición de la izquierda de hoy respecto al progreso. La compra del chalet es muestra de madurez política y personal, aunque tal vez  no haya sido en el mejor momento. La lucha por la justicia social no está reñida con el progreso social y personal, con el confort y bienestar familiar y personal de los ciudadanos, funcionarios y políticos, siempre que sea producto del esfuerzo y trabajo personal, y no del pago por favores, por comisiones, por evasiones fiscales, bonificaciones injustificadas. La izquierda contemporanea no sacraliza la miseria y la pobreza, por el contrario, le interesa el progreso económico como base del progreso social, que por desgracia ha retrocedido o se ha estancado, desde la caída del muro de Berlín. El crecimiento económico, el incremento de la productividad del trabajo, se ha traducido sólo en  grandes beneficios, cada vez más asimétricos, para las grandes empresas, que practican la precarización salarial, la temporalidad laboral, la ingeniería fiscal para evadir impuestos, y los precios y tazas de monopolio tecnológico, comercial y financiero, para maximizar sus ganancias. El progreso social no puede y no debe ser exclusivo para unos pocos, cuando hay crecimiento económico, cuando hay incremento de la riqueza a nivel social. Hay que "meterle" a la gente en la cabeza, convencerlos, de que la izquierda de hoy está por el progreso integral de la sociedad, y no sólo para unos pocos; que no quiere quitar nada a nadie, sino mejorar la distribución de la riqueza social, a partir del aseguramiento de unos mínimos de dignidad a nivel social, e ingresos personales en proporción al crecimiento económico y a la participación de cada cual. Digo, si no estoy equivocado. Los tiempos han cambiado, y el modelo alternativo socio-político (China, Vietnam, Cuba) todavía se está reinventando, y hay que seguir avanzando, aunque sea poco a poco. Hay que ser realistas y prácticos,  y dejar de meter miedo, so riesgo de quedarnos momificados. Pablo Moto hizo su trabajo, al margen de su ya conocida ideología.

miércoles, 27 de marzo de 2019

COMENTARIOS: "La izquierda se fragmenta en Madrid..."

"La izquierda se fragmenta en Madrid y se ampara en diferencias sobre programas electorales que aún no existen" / https://www.publico.es/politica/elecciones-autonomicas-izquierda-fragmenta-madrid-ampara-diferencias-programas-electorales-no-existen.html. 
Leyendo este artículo, me da la impresión de que empezamos primero por las siglas, por los candidatos, y terminamos relegando a un segundo plano el programa común; el elemento verdaderamente capaz de aglutinar electores y candidatos. Programa, donde todos tendrán que posponer sus máximos, y asumir mínimos comunes. Sin un buen programa pactado, todo se reducirá a lucha de siglas y personas, de liderazgos, y no por la consecución de un proyecto capaz de movilizar electorado. Una vez aprobado el programa, él candidato o candidatos, en número acordado igualmente para cada partido, deberían ser elegidos en primarias abiertas (afiliados, simpatizantes y todo el que quiera), en una lista única, aunque cada partido promueva individualmente a sus candidatos. Al final, serian elegidos los mas votados, sean de la formación que sea; pero con la obligación (ante notario) de cumplir con el programa pactado previamente. Desgraciadamente, cada uno se refugia en su iglesia, y se cree mejor que la otra. !Joder, que tendencia al suicidio!; incluso, si al final, por obra del espíritu santo, se sumaran mas consejales

viernes, 22 de marzo de 2019

COMENTARIOS: PODEMOS ¿Ser o no ser?

Monedero aboga por reiniciar Podemos en un Vistalegre III tras las elecciones. / https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=6694833593258281707#editor/target=post;postID=7211484337302832392;onPublishedMenu=allposts;onClosedMenu=allposts;postNum=0;src=postname

Hoy, leyendo mi última reflexión de fecha 20/01/2019, coincido con Juan Carlos en cuanto a que Podemos debe reinventarse; ya lo había mencionado, pero abundo algo más.

¿Por qué la dirección de Podemos no actuó con celeridad y serenidad con Iñigo, por indisciplina, sectarismo y traición, apartándolo del Partido? Pero también ¿por qué no tragó en seco, actuó con inteligencia, y negoció su apoyo a la candidatura única Mas Madrid? Podemos existe porque hubo un 15M, y la vanidad e hipersensibilidad en política, hay que dejarla a un lado. Ya a Errejón lo habían perdido desde hace tiempo, ¿dónde estaba la sorpresa? La prioridad y la razón de ser de Podemos, es llevar sus demandas a buen puerto, al ejercicio del poder para poder aplicarlas, y sin importar en última instancia, quien es el cabeza de lista o cuales son las siglas. Los partidos existen para organizar, canalizar y representar los intereses de determinado grupo social, y gobernar llegado el momento; y la política es el arte de negociar, de buscar consensos y apoyos para darle cumplimiento. Hay que saber cuándo ceder, para no sacrificarlo todo; pues la política también es oportunidad; y las condiciones y los tiempos cambian. Aún estan a tiempo de encontrar una salida negociada para las inminentes elecciones; evitar que se siga desgajando,y llegue más débil a las elecciones

Un partido de nuevo tipo no puede ser patrimonio de nadie, aunque haya sido su fundador o uno de ellos. Es cierto que es más fácil y viable dirigir con un grupo afín, pero eso al mismo tiempo es muy peligroso, porque  crea la base para la existencia de grupúsculos, divisiones, resentimientos y enfrentamientos. Nunca entendí, en Podemos, la presentación y aprobación de candidaturas en bloque con el cabeza de lista. Podemos se debe refundar una vez terminadas las elecciones, y en mi opinión debe hacerlo bajo estos cuatro preceptos básicos:
  • Debe asegurar la representatividad en el Consejo ciudadano, en la dirección y en los órganos de control, de todas las tendencias, en proporción a a los votos recibidos. Es un partido de origenes civilistas y transversales
  • La participación directa de los afiliados y simpatizantes en las primarias, la discusión y aprobación de los documentos programáticos, pactos, alianzas, debe conjugarse con la disciplina partidista, sino, no hay partido ni nada parecido, sólo un gallinero donde todos cacarean pero no terminan de poner los huevos. No se puede confundir un mitin, un forum civil, con un partido. Democracia es participación plena, acuerdos y consensos, pero tambien  unidad de acción, nos guste o no. El que no entienda eso, no respeta a los demás, y no quiere hacer cambios realmente; sólo quiere liderazgo y escucharse, aunque nunca se llegue a nada
  • Perfeccionar  los mecanismos de rendición de cuentas de los diferentes órganos, precisando y respetando la periodicidady la forma
  • Refrendar su rol partidista en condiciones normales, con las de facilitador de un partido instrumental en época de elecciones