Que la Banca o
los Bancos siempre preferirán un gobierno de derechas, es más que obvio, y por
tanto nada extraña que el grupo Santander promueva un gobierno del PSOE y
Ciudadanos. Celebro su declaración de intenciones sin complejos; aunque no deja
de ser una intromisión y presión descarada en nuestra democracia, porque oficialmente en
España no hay lobbies de presión (una aberración de la democracia
norteamericana). Que esta hipotética alianza
daría lugar a un gobierno de centro izquierda, es una gran falsedad, que
carece de todo rigor político; y en el menor de los casos, expresa
desconocimiento total de lo que es la izquierda, y de los orígenes, el argumentario
liberal (programa) y de las actuaciones de Ciudadanos. Lo que desea realmente la
Botín, las otras empresas del IBEX35, y el presidente de la patronal CEOE, es
mantener las políticas de bonificaciones y de exenciones fiscales que han permitido
que su contribución efectiva sea sólo del 4-6%; mantener las políticas de desgravaciones
a las grandes fortunas y las políticas de gobiernos, mantener las “políticas” de
mirar hacia otro lado con las propiedades y dinero de los bancos y otras
empresas en paraísos fiscales; las políticas crediticias a los partidos de
gobierno para controlarlos a través de sus deudas, que condonarían si terminan
cediendo ante ellos. En fin, lo que quieren los Botines es mantener su poder
suprasocial, su zona de confort empresarial, e incrementar la tijera de la desigualdad
de la riqueza social a su favor, aunque al final se rompa la estabilidad social.
Según el
articulista[1],
los bancos están estrangulados porque “les
ha pasado factura … el descenso de tipos de interés, hasta dejarlos en negativo
como es el caso de los tipos de depósito del BCE, impulsan el deterioro de los
márgenes bancarios, que unido a los costes regulatorios que soportan, les ha
llevado a tener que adoptar mayores comisiones y hundir la rentabilidad de los
depósitos para tratar de conservar todo lo
posible sus estrechos márgenes de interés” No entraré en detalles,
ni caeré en la retórica; sólo aclararé que en teoría la crisis financiera era
global y afectaría a toda la sociedad, ¿No? sin embargo, la Banca del IBEX35
cerró 2018 con no menos de 17,000 millones de euros, y de ellos 7.663 millones
de euros al Santander; pero es que incluso Bankia, público o semipúblico hasta
hoy, cerró con más 700 millones. ¿De qué vas tío? Es necesario que relacione
cuanto se ha recortado y se recorta en lo social, que relacione con datos pocos
sospechosos de comunistas, las familias y niños que en España viven por debajo
de los niveles de pobreza, los datos de desempleo, de emigraciones de nuestros jóvenes
hacia otras latitudes en busca de empleo, de ancianos con una mísera pensión, de gente desahusiadas de sus viviendas por no tener trabajo para poder pagarlas, de gente pasando frío por no poder pagar la calefacción en invierno, etc.
El PSOE, como dijo
alguien, coge el violín con la izquierda y lo toca con la derecha. Desde su
fundación, el PSOE jugó un rol progresista, y sin dudas, muchos cambios
sociales se deben a su gestión de gobierno. Pero su ocupación del espacio de la
izquierda dentro del bipartidismo, por largos años, y la involución de sus
barones históricos, sucumbidos ante la riqueza acumulada y el medio, los llevó a renegar
hasta de su base social de partido. Su cúpula ya pertenecía a otra clase social,
y tenían más compromisos y afinidad con la plutocracia, que con la clase
trabajadora. Pedro Sánchez, el superviviente, consciente o inconscientemente
(porque lo defenestraron y apartaron de la cúpula) está más cerca de la base,
pero aunque sus intenciones sean buenas, la presión de los intocables (IBEX35)
y de todos los que lo representan, es brutal. Un gobierno del PSOE, sin Unidas
Podemos, terminará cediendo al poder económico, y las medidas no pasaran de la
pintura y el colorete.
La inmensa mayoría
de los ciudadanos no está pidiendo que le quiten sus propiedades a los bancos y
grandes empresas; sólo están pidiendo revertir los recortes y mejorar las
condiciones de vida de todos, en proporción al desarrollo económico, al
crecimiento de la riqueza social y a la aportación de cada cual. No puede ser
que la carga la lleven sólo los que menos tienen. Y eso es lo que se
pretendería lograr de constituirse un gobierno del PSOE y UP; y eso se llama
justicia social, sin renunciar al mercado y a la propiedad privada. Dejen de
practicar la política del miedo, del susto, del comunismo, del Chavismo, que en un
país de una democracia occidental consolidada, y mediatizada por su pertenencia
a la Unión Europea, eso no sería posible. Un poco más de responsabilidad social no acabará con la
economía española; muy por el contrario. Sólo el desarrollo del capital humano, la
inversión en investigación para el desarrollo, las políticas para promover el
cambio estructural de la economía y las inversiones en él, el incremento del
poder adquisitivo de la población y con ello el incremento de la demanda,
aumentarán el nivel de competitividad y productividad de la economía española, se
crearía más empleo, y aumentarian las contribuciones a la seguridad social, y con
ello la hucha de las pensiones. Y a los defensores del capitalismo, les
asegurará estabilidad social y política. Lo quieren todo, Joder. Las sociedades
responden a equilibrios; todo tiene un coste, y desconocerlos tiene sus consecuencias